martes, 14 de marzo de 2017

Ramas de la lingüística - Fonemas

La lingüística es el estudio científico de la estructura de las lenguas naturales y de su evolución histórica, su estructura interna así como el conocimiento que los hablantes poseen de su propia lengua.
Nos aproximamos al estudio de la lengua en sus diferentes niveles, utilizando distintas ramas o herramientas que configuran cómo actúa el código lingüístico.  Entre las principales se distinguen son:
Nivel fonético-fonológico:
Fonología: Estudia  los fonemas de una lengua y sus fenómenos de tonalidad e intensidad, musicalidad del habla.
Fonética: Estudia la realización individual de los fonemas. Los fonos son sonidos del habla, realizaciones diferenciadas de un mismo fonema.
Ortología: Parte de la gramática que establece las normas de pronunciación correcta de los sonidos de una lengua en el discurso.
En las lenguas de señas el componente fonológico abstracto suele recibir el nombre de querología.
Nivel Gramatical
Gramática: Ciencia que estudia los elementos de una lengua y sus combinaciones.
Morfología: Estudia la mínima unidad con significado (el morfema), la estructura de la palabra y los mecanismos de formación y creación de ellas.
Sintaxis: Estudia la combinación de las palabras en dos niveles: el de los sintagmas, y el oracional.
Semántica: Estudia el significado de las palabras y su evolución histórica (lo que ayuda a clasificarlas). No confundirla con la semiología y semiótica.
Nivel léxico:
Lexicología: Estudia las palabras de una lengua, su organización y sus significados.
Lexicografía: Se ocupa de los principios teóricos en que se basa la composición de diccionarios.
Etimología: Especialidad lingüística que estudia el origen de las palabras, razón de su existencia, de su significación y de su forma.
Nivel estilístico:
Estilística: Estudio del estilo o de la expresión lingüística en general.  La estilística analiza los efectos bellos y expresivos del lenguaje logrados por el empleo artístico de sus recursos.
Caligrafía. Se considera un arte escribir con letra bella y correctamente formada, según diferentes estilos.
Grafología: Se considera un arte que pretende averiguar, cualidades psicológicas de quien la escribe a través de las particularidades de los trazos de su letra.
Ortografía: Forma de escribir respetando las normas de la Real Academia de la Lengua.
La Grafología, la Ortología y la Ortografía no son campos estrictamente lingüísticos, ya que intervienen factores culturales e históricos.
Semiología: Es la disciplina que estudia la interpretación y producción del sentido de lenguajes, discursos (orales o escritos) y de los signos en la vida social. Sinónimo de semiótica.
Semiótica: Es la teoría general de los signos. En la medicina es el estudio de los signos de las enfermedades desde el punto de vista del diagnóstico y del pronóstico.
Filología: Estudio de los textos escritos, a través de los cuales intenta reconstruir, lo más fielmente posible, el sentido original de los mismos con el respaldo de la cultura que en ellos subyace.

FONOLOGÍA Y FONÉTICA
La fonología es un subcampo de la lingüística, describe el modo en que los sonidos funcionan, en una lengua o en las lenguas en general. Cualquier mensaje conlleva, en su pronunciación, una leve pero perceptible melodía (o curva melódica) producida por la sucesión de sílabas tónicas y átonas. Cada sílaba alcanza al ser pronunciada una altura tonal que va produciendo a lo largo del mensaje lo que denominamos entonación.
Suele decirse que es la actitud del hablante ante lo que dice lo que produce los distintos tonos expresivos:
-Si el hablante se encuentra en una actitud anímica normal, emitirá su mensaje en un tono enunciativo: Guatemala no padece violencia.
-Si se encuentra en una actitud dubitativa, producirá un mensaje interrogativo: ¿Existe violencia en Guatemala?
Si se encuentra exaltado, su mensaje adquirirá un tono exclamativo:¡Ya estamos hartos de tanta violencia! Y muchos otros más.
Estas diferencias tonales se expresan en la escritura mediante la utilización de unos signos de puntuación especiales: ¿?, ¡ ! o su ausencia.
Esa curva melódica se corta cada vez que el hablante realiza una pausa, es decir, cada vez que el hablante termina de pronunciar un grupo fónico. La longitud de estos grupos en español es de unas ocho a once sílabas, de ahí que la métrica castellana abunde en versos octosílabos o endecasílabos.
Al final de cada grupo fónico es dónde la curva melódica presenta un rasgo claramente perceptible. Lo que conocemos con el nombre de tonema; que puede ser de varios tipos:
-Suspensión (si es sostenido); es el tonema de las oraciones exclamativas.
-Semicadencia y cadencia (si baja el tono); es el tonema que aparece en las oraciones enunciativas, tanto afirmativas como negativas, así como en las denominadas desiderativas, dubitativas o de posibilidad
-Semianticadencia y anticadencia (si sube); es el tonema que suele aparecer en las oraciones interrogativas y en los grupos fónicos no iniciales ni finales de las enunciativas.
Estos podrían ser esquematizados del siguiente modo:


La Fonética estudia los sonidos de uno o varios idiomas, sea en su fisiología y acústica, o en su evolución histórica. La fonética es de tres tipos: articulatoria, acústica y auditiva.
La articulatoria o genética estudia los fenómenos relacionados con el emisor, es decir, la producción y articulación de sonidos. Esta rama es la más antigua y ha alcanzado un grado de desarrollo considerable, hasta el punto de que puede describir con alta precisión exacta los órganos articuladores para cada sonido, así como la energía de expulsión del aire de los pulmones, la tensión de los músculos que intervienen en cada expulsión, etc.
La acústica o genémica estudia los fenómenos relacionados con las características físicas del sonido y su transmisión. Estudia la duración, intensidad, altura o agudeza, etc., de los sonidos del lenguaje.
Y la auditiva estudia el sonido desde el punto de vista del receptor, los mecanismos que lo relacionan con el oído humano y la audición.

Hemos clasificado los sonidos del idioma español que usamos en Guatemala, primera división: vocálicos y consonánticos.
                      

• En esta tabla se han agregado los sonidos de /ch/ y /sh/  que en su mayoría son usados para vocablos de origen indígena (principalmente maya):  /CHokolate/ /Chalupa/ /CHamperico/
• El sonido /Sh/ representa la grafía X, que tiene sonidos diferentes en muchas palabras guatemaltecas  /m-i-sc-c-o/,  /silófono/, /jiménes/ (cuando se haya escrito con X): /shanadú/,  /shokomil/, /shetulul/, /sholco/, /ishto/.
• Se han omitido los fonemas /Y/ y /Ll/ pues en el habla guatemalteca carecen de uso: /iave/ por Llave, /iegua/ por Yegua.  /iagual/, /ianta/.
• El sonido de la J y G se diferencian por su sonoridad /gato/  /josé/, o más ilustrativo es el ejemplo de /kajón/ y /kagón/. Pueden ver otros fonemas de forma interactiva en el siguiente enlace: 
Fonemas
Los fonemas se caracterizan por los órganos móviles y fijos  del aparato fonador que participan en su articulación.
Muchos animales, especialmente los pájaros y los mamíferos pueden producir sonidos, pero sólo el hombre es capaz de hablar porque tiene suficiente dominio de su aparato fonador para producir la extensa gama de sonidos necesarios para hablar, además, claro está, de la capacidad de su cerebro para manejar las ideas por medio de dichos sonidos (área de Broca y área de Wernicke).

                                    
La ciencia ha establecido que para que exista sonido se requieren tres elementos: un cuerpo elástico que vibre, un agente mecánico que ponga en movimiento ese cuerpo elástico, y una caja de resonancia que amplifique esas vibraciones y las haga perceptibles al oído, a través de las ondas que las transmiten por el aire. Ejemplo: Una guitarra tiene cuerdas, ese es el cuerpo elástico; se ejecuta con los dedos o uñas, ese es el agente mecánico. Posee una caja de madera, ese es el amplificador.
La voz humana tiene las tres condiciones señaladas. El cuerpo elástico que vibra son dos membranas situadas en la garganta llamadas cuerdas vocales. El medio mecánico es el aire. La caja de resonancia está formada por parte de las cavidades: faríngea bucal, nasal y torácica.
La diferencia fundamental que existe entre la voz humana y cualquier otro instrumento musical, es que se trata del único instrumento en que la forma y disposición de la caja de resonancia se modifican continuamente, adoptando diversas posiciones que cambian, amplían o disminuyen su capacidad. Así se convierte en el más perfecto de todos.
De tal extraordinaria condición nace la riqueza sonora de la voz, cuyas sutilezas mecánicas no pueden ser igualadas por ningún otro instrumento mecánico.
Las cualidades más importantes de la voz humana son el tono, el timbre, la intensidad y la velocidad. 

El tono: es la cualidad de los sonidos, dependiendo de su frecuencia -número de vibraciones que la columna de aire produce al pasar por las cuerdas vocales-; si la frecuencia aumenta o disminuye produce sonidos agudos -si se eleva- y graves -si desciende-.  Esto permite que en algunas inflexiones haya un modo particular de decir algo, según la intención o estado de ánimo de quien habla. El tamaño de las cuerdas vocales influye en la agudez o en la gravedad, a mayor tamaño, mayor gravedad; y a menor tamaño, mayor agudez. Por esto la voz de la mujer es aguda y la del hombre es grave. 
El timbre: cuando una misma nota musical es producida por un piano y luego por un violín, se percibe claramente una diferencia entre las dos notas a causa del timbre. Igual sucede con la voz humana, es el matiz característico de cada persona y depende del mecanismo resonador de la voz. Cuando sabemos quién nos habla por teléfono, es a causa del timbre.
                        
La intensidad: es el mayor o menor grado de fuerza espiratoria con que se produce un sonido. Por esta razón encontramos sílabas fuertes -tónicas- o débiles -átonas-. La intensidad de la voz está íntimamente relacionada con los estados emocionales. Un pensamiento sereno y tranquilo será expresado con un mínimo de intensidad, sin mucho volumen de aire; una conversación alegre o con enfado, requiere un porcentaje mayor de intensidad y volumen de aire. 
         
Velocidad: todo sonido requiere un mínimo de duración para ser perceptible. Al tiempo que dura un sonido se llama en fonética "cantidad". Esta varía en cada caso según el temperamento, la edad, el estado emocional, las costumbres. Todos tenemos un promedio de velocidad de la voz característico y diferente, pero no empleamos ese promedio exactamente igual todas las veces. Cuando se tiene cansancio o se está enfermo, la velocidad es -inconscientemente- lenta. Cuando, por el contrario, se está entusiasmado o lleno de autoridad, ese promedio será, también inconscientemente, más rápido. Para que los educando se den cuenta del papel que juega la voz en la adquisición de destrezas idiomáticas orales, necesitan convencerse de su importancia, conocer la manera cómo se produce, saber sus cualidades y tener idea sobre su promedio de velocidad.
Producción de la voz.- El aire está almacenado en los pulmones traído por el mecanismo de la aspiración obligado por la presión que hace el diafragma. La columna del aire sale por los bronquios a la tráquea y de esta a la laringe en donde se encuentran las cuerdas vocales, dos músculos elásticos que pueden juntarse o separarse; cuando están separados dejan una abertura de forma triangular llamada glotis. El aire llega a las cuerdas vocales y al encontrarlas cerradas las obliga a entreabrirse, pero como son elásticas, vuelven a cerrarse, produciéndose unas vibraciones rapidísimas del aire en su contacto con ellas y originando así la voz.
Cuando hablamos, la glotis está cerrada. Cuando no hablamos, está abierta. Es evidente que la respiración es fuente de energía vocal. Por ello, del control adecuado de la respiración depende, en mucho, la calidad de la voz. 

COMUNICACIÓN DRAMÁTICA

El teatro comunica un mensaje al público. Es decir, durante la representación teatral se gesta una red de relaciones muy complejas entre el ...